Hoy,
día mundial de la Libertad
de Prensa, habrá que hacerle un monumento de campo de concentración a los
medios masivos de incomunicación de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Ecuador,
patrocinadores de la Revolución
de los Miserables. El vicio carroñero de sus sofismas alimenta a los tiranos de
la manigua.
Y
a doña Farsolandia, alias Colombia, habrá que prepararle un hospital de guerra para
que pueda parir su fraude electoral en el quirófano de la paz a la cubana.
En
síntesis, el periódico de hoy cumplirá con su función de ente fomentador de la
alta cultura bromatológica: madurará los aguacates del almuerzo… Mientras que Maduro
y Castro lo usarán como pieza higiénica de sus tareas escatológicas.