El circo de los farsantes.
El mismo dado es
lanzado de nuevo, como el suplicio de Sísifo, para volver a caer sobre su única
y fatídica cara, la cara de una farsa llamada Colombia. Un inframundo travesti
que se disfraza de engaño, para creerse país. Una cloaca por vocación que desde
la creación fue condenada al fracaso. Y no por sus instintos, ni sus riquezas o
su belleza paradísiaca, ni tampoco por los puñados de inocentes ciudadanos
anodinos que ven como los devoran los demonios que pare repetidamente la
entraña de su mal eterno.
Esta trenza de
tierra se condenó porque no se fatiga de criar protervos engendros que desde la
más tierna infancia aprenden de la mano de sus padres (padres de la patria) a
urdir contubernios para manipular, robar, engañar, pisotear, tender trampas y
saquear riquezas y conciencias. Aquellos ángeles del mal están amparados por un
sistema que nace históricamente y per sécula en la tenencia de la tierra y los
recursos económicos, pasa por la política, por los medios -prostitutas del
poder (pertenecientes al poder económico o político)-, y los líderes de las
iglesias, que en su inocencia institucional pro cristiana son ultrajadas por
las mismas enredaderas del mal y terminan sirviendo al capataz de turno, que
alimenta con sevicia innata la toxicidad del cada día en Farsolandia. Tampoco
se escapan de este aval para el fiasco permanente, millones de habitantes de
todos los estratos y pelambres, que sin recato se creen buenos, pero cada día
alimentan a esos cancerberos y luego se lavan las manos… sino, de dónde salen 6
millones de votos….
El país
democrático, que ingenuamente cree que existe, se sumerge en las hordas
informativas sobre las elecciones venideras. Que el uno desnudó la inmoralidad
del otro; que el otro halló el lado oscuro de su competidor... y el colombiano
ahí, con su ingenuidad violada y con sus genes de mil años de odio hirviendo. Alrededor
de 20 guerras civiles y un sinfín de actos de horror contra sí mismos no se
ruborizan, sino que se expresan por uno u otro de los candidatos.
Otros, pocos,
muy pocos, hastiados, miramos desde la ventana con los brazos cruzados la piscina de excremento donde nada el
futuro, el nuestros y el de los hijos de la patria venidera. Algunos creen que
los columnistas son independientes (si lo fueran, no escribirían en los medios
del sistema, aunque algunos hacen intentos decorosos....); que los medios
buscan el equilibrio; que los opinadores reconocidos no tienen vínculos
ocultos; que las instituciones cumplen a trancas y mochas con su deber.... Y al
tiempo se resisten a aceptar, por cursi, la idea de una conspiración en la que
todos aquellos engendros son uno mismo, UNO solo que lleva las riendas del destino en
las fauces de su más oscura manipulación.
Otros tantos no
votan, haciéndose cómplices inútiles que no aceptan cargos. Revolviendo el
caldo bacteriano de nuestra orgánica desgracia.
El voto en
blanco no sirve porque los Santos y los Zuluaga desde hace 200 años decidieron
que fuera así. Y una consciencia individual limpia tampoco aporta.
La izquierda en
Farsolandia no es más que un aleteo de universitario pobretón. Esos que se
fueron a la selva para tender emboscadas al propio pueblo del que emergieron,
quiebran sus conciencia con facilidad al primer millón o al primer cargo
público, cierto Gustavo? Y el resto, comunistas multimillonarios... que fácil
armar embelecos con los bolsillos llenos.
Todo juega en
contra. El destino fatídico se burla de lo que parece, pero no es. Y ellos, los
mal paridos, caminando de nuevo sobre la proclividad al fracaso, se sientan en
las gradas de un circo donde 47 millones de payasos hacemos las delicias de
estos espectadores farsantes que pagan el espectáculo desde hace dos siglos. Al
final, todos regresarán a sus mansiones- madriguera a regodearse, cogerse la
nalga los unos a los otros y a reír del pobre espectáculo que les ofrecimos. En
4 años serán otra vez amigos y mozas, compadres y aliados, contradictores
dicharacheros con su asta viril lista para ensartarla en el travesti de nuevo.
Y uno aquí,
hablando basura, como si sirviera de algo.
2 comentarios:
Qué maravilla de texto quedé enamorado. Profunda síntesis de una realidad nacional donde los lagartos electoreros nadan en su charca de estiércol...
Querido Anónimo:
Es verdaderamente deprimente el panorama de este pobre pueblo manipulado por la oscuridad de la mente obnubilada por la mentira que por todas partes ronda.
Pero no estamos solos. Un día nuestro país fue consagrado al Divino Corazón y si el pueblo lo ignora o hace burla de ello, el Señor no lo olvida porque El no puede ser infiel al pacto realizado.
Invoquemos al Divino Espíritu. Te comparto esta hermosa oración que copié de un video que no se como hallé en alguna página de nuestra Iglesia.
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