jueves, 3 de julio de 2014

Tragedia amazónica



Lo peor que le puede pasar este viernes al fútbol es que la Selección de Pekerman gane…

Porque ese acto criminal de la tara muisca no será la consecuencia superior de un juego sino la venganza trapera contra el patrón del continente… goleada por la espalda de la mediocridad carioca… una canallada similar al 5-0 contra la Argentina

Además, la mortandad de indios embotinados será proverbial. Ritual de cafres trasmutados. Triunfo de la barbarie sobre la euforia. Y como si fuera poco la premeditación del delito deportivo tendrá su titular de sangre: “Control ecológico de la plaga embrutecida”.

La prepagada prensa de los periodistas, amarillos y amarillistas, convertirán automática al onceno en campeón mundial 2014, 2018 y 2022. La respuesta del equipito será una colombianada digna de un registro coprológico. En la semifinal va ganando uno cero, pero en los últimos segundos del tiempo extra hacen un autogol. Se van a las penas máximas y quedan por fuera de la final… Es la autonomía plena del derecho al fracaso… Oh júbilo inmoral, oh mortandad ebria de embuste y guaro…

Santa Rita, Patrona de los Imposibles, líbranos del triunfo sicótico. La enjalma de la derrota, herencia de Maturana, es el mejor remedio para el vómito negro o fiebre amarilla…