lunes, 22 de diciembre de 2014

Cuba 1993, Cuba 2014


Por Germán Fernández P.*

1993, atardecía en La Habana, el aroma de las piedras hastiadas de mar recorría el malecón y a tiro de piedra la ciudad jineteada seguía atrapada en el tiempo, pisoteada o lisonjeada por las lenguas de los agotadores fisgones que de todas partes del mundo van con ansias de husmear o falsamente vanagloriar el legado fatídico de Cienfuegos, el Che y la Hiena de Birán (alias Castro).


En Bogotá, a 2.443 kilómetros de distancia, por los pasillos -vaya ironía- de la Universidad Los Libertadores, hablábamos de la misma capital cubana. En la calle caía una llovizna incesante y tímida, lasciva e infinitamente bogotana.


Atragantados de ganas de periodismo, Julcas y yo sabíamos que habíamos construido una forma de ver el mundo y anticiparlo, profetizarlo, bajo la sencilla seguridad que da el infalible y consistente comportamiento del homúnculo latinoamericano y su proclive vocación al fracaso, la farsa y la trapisonda. Así somos, así lo prueba la historia de manera tan incesante como aquella llovizna vespertina y bogotana.



La profundidad en la historia, por antonomasia, Julcas, nos traía y deleitaba por las páginas recientes del acontecer europeo. Sin mucho asombro, mirábamos, por la ventana de la década anterior ya marchita, las cuatro cuadras de fila de los moscovitas para entrar al primer Mc Donald’s, cercano a la Plaza Roja.


El Glásnost y la Perestroika como fulanas de esquina se habían vestido de Big Mac, Coca-Cola, Marlboro y Blue jeans, y no pasó un lustro antes de que la Revolución bolchevique se fuera a la mierda; no habían pasado diez años del primer mordisco a la hamburguesa del imperio y ya no había muro de Berlín, ni guerra fría y  ¡la cortina de hierro se apolilló!


La bragueta de Tío Sam se había hecho sentir... el capitalismo hechicero se había 'tirado' las conciencias anacrónicas y entelarañadas de los comunistas y les había otorgado la sinestésica miel de las barras y las estrellas.

 Décadas de bloqueo comercial e inútil a la antillana isla de los Siboney solo nos dejaron, en aquel atardecer del 93, la certeza de que la apertura sería la agonía, muerte y olvido del comunismo del fantasma de Castro y sus esbirros.

 En esa noche del mismo día del 93, indelicadamente fría por cierto, nos visitó en clase un espectral enviado de la embajada cubana para hablar de la revolución -pedagógicamente- y no faltó el petardo palurdo que les celebró e hizo loas al chasco de la Sierra Maestra, como muchas mentes inertes que creyeron (creen) que aquella histórica y histérica patraña era, (sería, fue) un símbolo.

  
Borracheras de ron con nombre caribeño pero de empresa europea harán las delicias de un pueblo musical y atónito, y el último muro de la filosofía de la pobreza compartida caerá. Así se dijo aquella tarde, aquella noche, bajo el influjo de bocanadas de Marlboro y Coca-Cola, y así será.



Ave César!


* Comunicador Social-Periodista. 

viernes, 19 de diciembre de 2014

Barras y estrellas para la perrera


La noticia de moda tiene de plácemes a los godos de tuerca y tornillo. El ilustre comité azul envío sus peticiones para que este espacio editorial eche sal en la llaga.

Tarea de desinfección que se hará con la brevedad del veterinario.

Resulta fascinante observar como el decadente mamertismo se arrodilló, con su vocación de ramera, ante el sonido de su majestad el dólar. Ritual de coperas.

Bastó que la mano del patrón, domadora y ejecutiva, le aflojara el dogal al gozque cubano y la jauría aulló de alegría. Los ejemplos ilustran, con la radiografía del servilismo, como funcionan los alborotadores tropicales.

Maduro, que hasta ayer lanzaba denuestos alevosos contra el imperio, hoy tilda de valiente al emperador. A él se aliaron las hermanitas de las Farc. Ayer con general secuestrado, hoy con cese de fuego unilateral… 

Pero, ¿por qué la diestra del Tío Sam le soltó la rienda a la mula revolucionaria? 

La respuesta del redomado vaquero es simple. El tesoro de las Farc no se puede quedar empeñado en los burdeles de la Habana. Don Rico Mac Pato administrará el estado financiero del crimen y lo convertirá en un emporio empresarial donde se críen mascotas de raza fina como Lassie. 

El resto de sarnosos, que usurpan los claros de la manigua, aguardan con las babas de Pavlov unos desperdicios que no les llegarán. La razón es que sus cerebros de sabandijas solo fueron diseñados por su involución de alimañas para ser parte de la eterna bufonada del territorio libre de América.


jueves, 18 de diciembre de 2014

Castro, el Tío Sam te USA




El Secretario del Partido Comunista Cubano (PCC) decretó, por unos dólares más, un nuevo reglamento revolucionario para enfrentar el ataque de la civilización y del progreso.

Ante la magnanimidad de la bota yanqui, que decidió aflojarle un tris el pescuezo, el régimen levantó el embargo estomacal para sus famélicos bolcheviques.

La primera medida, tendiente a facilitar que los jugos gástricos se adapten a las futuras francachelas de comida chatarra, autorizó a degustar por familia, cada 15 días, una hamburguesa doble carne de McDonald's.

De igual manera, los emasculados camaradas por la hoz ideológica podrán aliviar sus atrofiados cerebros leninistas con los  abundantes artículos de la revista Playboy. Sus militantes deberán usar yines Levis, fumar Marlboro certificado por Philip Morris y beber Coca-Cola por galones hasta mear Pepsi en la Habana Vieja.

Los Castro se comprometieron a suplicar de hinojos la instalación a perpetuidad de una sucursal de Disneylandia en la Plaza de la Revolución. Para tal fin se ordenó diseñar un emblema nacional con un Ratón Miguelito para homenajear a las ratas del Caribe.

Los tiranos hicieron pública su dicha de jineteras al anunciar que muy pronto vendrán los cowboys de Texas a montarlos… y a desasnarlos a punta de látigo y espuela gringa.

Por ese singular motivo, las altas directivas del PCC autorizaron a sus balseros para que presten el servicio militar con los marines. En esos destacamentos realizarán limpieza de letrinas y servicio de camareras.  La norma rige a partir de la ampliación de la base de Guantánamo, que copará la totalidad del islote.

En conclusión, la feliz medida contagió a las hermanitas de las Farc para que hicieran un cese en sus bordados de sangre. La invitación es motivante. El mamertismo, de chusma y canabis, se derritió cuando el olor a dólar sembró de capitalismo salvaje a los montes de la Sierra Maestra, donde anidará el águila calva.


Posdata.

Fidel, ya puedes llamar al taxidermista porque sobre tu tumba se edificará el complejo militar Theodore Roosevelt: “I TOOK CUBA”.  



martes, 9 de diciembre de 2014

Las adivinanzas de la pobre viejecita



Una aldea paupérrima, levantada por feroces antropófagos, anda en un jolgorio de sangre y jungla.

Si quiere saber de qué ente vergonzoso se trata, por favor adivine las coordenadas del desastre.

1). Su policía lidera ataques terroristas contra su Gorgona.

2). El hampa entró de paseo a la Escuela de Carabineros y les cambió por chicles el armamento.

3). Un general salió en bermudas a pasear por las maniguas de su enemigo para asustarlo con una acción humanitaria.

4). Un alto magistrado es condecorado por prestarle el vehículo oficial a su hijo para que lo convirtiera en un burdel motorizado.

5). Los borrachos al volante compiten por quién asesina más inocentes en un solo choque.

6). Las víctimas de los caníbales desfilan delante de sus verdugos, según su estrato social, para suplicarles perdón.

7). Un funcionario de provincia se inclinó para besarle las zancas a un adúltero con título de nobilísima cornamenta.

8). La paz se le vende al crimen con la hipoteca de la conciencia de la nacionalidad.

9). El narcotráfico, sustento macabro del terrorismo, se convertirá  en una contravención de tipo comparendo ecológico.

10). Farsolandia no pudo adivinar porque tiene en proceso otros  escándalos inmorales para enlutar a la memoria de un pueblo que se niega a vivir con la dignidad de la civilización.


miércoles, 19 de noviembre de 2014

Otra vez mi general borracho


Farsolandia literalmente se defecó sobre la paz de la habanera alcahueta. El secuestro del alto oficial en el Chocó es parte del libreto de un cuartel emboscado por el legalismo inmoral de los apátridas. Aplausos para la patrulla que le dio jaque mate a la comedia de “Juanpa-panatas”…porque el señor de los Falsos Positivos, en uso de sus facultades de saltimbanqui en feria de pueblo, logró el campeonato mundial del teatro de mario-tetas.

El resto es la radionovela de la Voz del Sicofante.

En ese medio nacional se tratará sobre el meollo de la tramoya. La verdad sin caretas se sabrá en siete años. Será cuando el próximo gobernante de Hatogrande esté metido en un berenjenal  y necesite un rastrojo lleno de humo de marihuana para condimentar la olla podrida familiar.

Entonces sucederá un acto inusual en la democracia del burdel más antiguo de Latinoamérica.

Escena 1. La amante del coronel Buendía, que es la misma moza del sindicato de testigos prepagos de la Piscalía, se entrevista con la lengüilarga de turno y  prende el ventilador de sus bragas.

Escena 2. El editor judicial del canal de TV que no ha podido subir su sintonía lanza un libro con el título más original de la historia literaria de la cuentería: El General en su laberinto de selvas donde cuenta como fue la Operación Atrato del Comando Titán en el 2014.

Escena 3. Los lagartos de turno dirán: “No vamos a permitir, bajo ninguna circunstancia, que el Estado de Derecho sea vulnerado por fuerzas oscuras que intentan desestabilizar la democracia. Por lo tanto este despacho pondrá en conocimiento de las autoridades competentes los hechos para que se ejecute una investigación exhaustiva, hasta sus últimas consecuencias…

El resto del discurso es patrimonio de Sábados Felices.

Por ahora “Álzate” la falda que comenzó la parrada navideña en traje de camuflado porque en la farsa del país de los escándalos todo está mimetizado…


lunes, 10 de noviembre de 2014

El 9 de noviembre de 1989

Hoy recuerdo el día más feliz del siglo XX porque a un grupo de gente decente le dio por mearse en el Muro de la Infamia.

Producto de esa fenomenal micción el sindicado de esclavos denominado URSS se fue por la cañería del marxismo hacia el estercolero de Stalin.

El mariguanomarxismo ha muerto. Viva la República Cristiana de don Miguel Antonio Caro.

Por eso motivo, el Comité Editorial de Farsolandia invita a todos los sindicalistas a la gran marcha, en paso de ganso, para exigir el derecho a NUESTROS DEBERES.

Vamos a TUMBAR EL MURO DE LA MEDIOCRIDAD NACIONAL.

viernes, 7 de noviembre de 2014

La alcaldada de Gales




El alcalde de Cartagena de Indias, sujeto diseñado para la ignominia del olvido, logró demostrar con su monumento a la derrota de Vernon una pasión por la esclavitud.

Él cargó sobre su espalda de ilota las cadenas de la infamia opresora de su formidable miseria. Se degradó de la iniquidad babosa del reptil hasta la ruin guarida de la frivolidad, en grotesca  bajeza de cortesana. Su sombra nefasta fue iluminada por la oscuridad del escándalo.

Él el tirano hambriento se alimentó de hinojos ante el enjuto dúo de los adúlteros, descendientes de sepulcros y piratas.  Escándalo  incorregible del vergonzoso defecto de la demagogia.

Síntesis de la ley del déspota. Impulso negativo del sórdido verdugo de la Historia.

A usted, pobre títere emasculado, Colombia le niega el derecho sublime de cantar el Himno Nacional en su estrofa de heroica memoria:

“…A orillas del Caribe
hambriento un pueblo lucha,
horrores prefiriendo
a pérfida salud.
¡Oh, sí! De Cartagena
la abnegación es mucha,
y escombros de la muerte
desprecia su virtud…”

Señor pasajero de la abyecta tempestad mediática reciba mi salivazo de tinta sobre su rostro de sabandija.


viernes, 31 de octubre de 2014

El consejo de la careta




Si en la noche de las brujas deseas causar pánico, te puedes disfrazar de político colombiano o en su defecto de pacifista cubano. Y no te preocupes por cambiarlo el año entrante. La razón es la que la Patria Boba usa el mismo antifaz desde hace más de 200 años.

miércoles, 22 de octubre de 2014

la pregunta de la paz

Señores titiriteros de la Farsolandia:

¿Cuándo comienza los diálogos de paz entre el cartel del corrupción y el presupuesto nacional?

martes, 30 de septiembre de 2014

Piedad con la esperanza


“El hombre nace bueno y la sociedad lo corrompe” (embuste)

El hombre nace pecador y Jesucristo lo redime.

J.R.C.R.

lunes, 15 de septiembre de 2014

El cadalso de la paz


El cartel de la corrupción, vigente desde 1810, se amangualó con los terroristas de la Farc en un lupanar del Caribe para destazar a la patria asesinada. El negocio de los forajidos radica en vender el surco de dolores para regarlo con sangre de jornaleros.

Y aquí, en el altiplano, a los amos de mitra, levita y mentirita les dio por cambiarse los botines. El intercambio simbólico de la pecueca huele a la mojiganga de 1781, cuando los señoritos de Santafé se colocaron los alpargates del Socorro comunero mientras traicionaban las capitulaciones.

¿Sabe usted cuántos acuerdos de Paz se han firmado desde 1812, cuando a la raza de víboras de cierto triunvirato sabanero le dio por llamarse “Altezas Serenísimas” al mejor estilo de los Santos de la Habana?

La respuesta hiede a mentira…

Alma bendita de don Pablo Morillo, el Pacificador por antonomasia. El Conde de Cartagena sí supo como edificar los altares de la nacionalidad…




miércoles, 9 de julio de 2014

La hora del Jogo Bonito



La FIFA anunció de forma exclusiva para el Departamento de Comunicaciones de Farsolandia que los partidos Colombia-Brasil tienen nuevos horarios. Los encuentros se jugarán siempre a la una y siete de la tarde o en su defecto a las siete y uno de la noche.


Sobra recórdarles a los nacionales que deben decir cuando un “Mineirazo” les pregunte qué hora es: La respuesta correcta es  “La una y siete”.

jueves, 3 de julio de 2014

Tragedia amazónica



Lo peor que le puede pasar este viernes al fútbol es que la Selección de Pekerman gane…

Porque ese acto criminal de la tara muisca no será la consecuencia superior de un juego sino la venganza trapera contra el patrón del continente… goleada por la espalda de la mediocridad carioca… una canallada similar al 5-0 contra la Argentina

Además, la mortandad de indios embotinados será proverbial. Ritual de cafres trasmutados. Triunfo de la barbarie sobre la euforia. Y como si fuera poco la premeditación del delito deportivo tendrá su titular de sangre: “Control ecológico de la plaga embrutecida”.

La prepagada prensa de los periodistas, amarillos y amarillistas, convertirán automática al onceno en campeón mundial 2014, 2018 y 2022. La respuesta del equipito será una colombianada digna de un registro coprológico. En la semifinal va ganando uno cero, pero en los últimos segundos del tiempo extra hacen un autogol. Se van a las penas máximas y quedan por fuera de la final… Es la autonomía plena del derecho al fracaso… Oh júbilo inmoral, oh mortandad ebria de embuste y guaro…

Santa Rita, Patrona de los Imposibles, líbranos del triunfo sicótico. La enjalma de la derrota, herencia de Maturana, es el mejor remedio para el vómito negro o fiebre amarilla…




jueves, 26 de junio de 2014

“…y empieza a presentirse de la epopeya el fin…”



Amigos, por favor ayuden a Farsolandia que sufre de una aguda fiebre amarilla

Si la selección de Fútbol de Pekerman (léase bien Pekerman y no de Colombia porque es más criollo un ornitorrinco con pasaporte sueco) le gana a un equipo medianamente decente como Uruguay probablemente lo espere Brasil en cuartos… y hasta ahí se nos enfrió la mazamorra.

Entonces ruego el favor de transmitir, vía redes sociales, lo siguiente:

Señor hincha del furor cervecero.

1. El pabellón nacional no es para sonarse lo mocos, ni para secarse el sudor del cogote ni para usarlo de taparrabos ni mucho menos para torear a los trasmilenios.

2.  Traten de no poner a parir a sus barraganas trillizos dos veces por año.

3. La idea es no matar a cadena de bicicleta a su inquilino deudor.

4. La harina, la espuma y los miados de balcón producen caspa. No usarlos como aditivos del delirio enardecido.

5. Tampoco es aconsejable masajearle las nalgas al jefe, ni a la moza del patrón.

6. Y por favor no bautizar a los futuros hijos de esta patria ensangrentada con nombres como: “Steve Brazuca”,  Jeisón Fuleco, ni Yasbledy Garota…

7. No olviden que después del desenguayabe mundialista vienen todos los horrores de la “pazubana y entonces es mejor ser un indio embrutecido por un balón que un bolón entelerido.

8. Y la amante del gallo, es decir la Polla, de mi corral  dice que la fiesta de las pelotas quedará así. 1. Brasil. 2. Alemania. 3 Argentina. 4 Holanda… que vaina jodida ya me contaminé del maleficio amazónico.


sábado, 14 de junio de 2014

La ebriedad en el zoológico



La gusanera de la res-pública esta ahíta de ejercer su derecho  voraz a la coprofagía.

La conciencia entelerida del impulso pavloviano mueve a Farsolandia. Ella, casquivana de coqueteos mortuorios, levanta el estandarte de su horizonte agónico. El jumento enjalmado goza del látigo de la idolatría extraviada: Fútbol y elecciones. Juerga lúgubre.

La dupla de la bacanal estalla. La persigue el furor de los gentíos. El vocerío cavernícola de la horda impone su insulto a la civilización. La calumnia y el doctor Soborno copulan en una orgia de filibusteros.

Tiembla la turba saciada. La mueve el lúpulo fermentado en los trapiches de la desdicha. Bufido espantoso. Efervescencia de la utopía desfigurada.

El sentimentalismo chauvinista se desboca. Se impone la fiera en la lejana adulación de la manigua. El furor sudoroso del simio desencadenado escapa. La electrizante multitud de los tarmanganis edifica su cadalso. Marcha feroz del vicio conspirador.

La ignominia de los pigmeos alebrestados se agiganta ante la marea del embuste. Los inunda un charco de estiércol electoral.

La inmensa intoxicación del delirio, en vértigo perverso, los arrea. El placer libertino del engaño alumbra los estertores de la chusma. Alucinación de la estulticia, juego de hetairas.

El catafalco está listo. La patria, nula y lisiada, bajará tranquila al sepulcro donde el corruptor insolente la usará como la letrina de la democracia.


jueves, 12 de junio de 2014

El festín de los espectros



Las heces del zorro se escriben con u porque en la ortografía del crimen los falsos positivos se firma con una equis.

La atávica desgracia entró en su recta final. El zorrillo fétido se escapó de una feria de tinieblas obscenas. Miente porque no huyó, se eclipsó. Se camufló de bandolero inofensivo. Fue contagiado por la diatriba ponzoñosa de su deforme patrón.

Mientras el saltimbanqui abyecto lucha feroz por los potreros de Farsolandia, el ubérrimo senador está cavilando como ampliar el surco de dolores que dejó la nefasta noche de su dictadura fanfarrona.  El mandamás de la tragedia ruge venganzas contra su crío, el usurpador de los Santos.

La dupla de la autocracia sombría acecha. Tiemblan indignados ante el rencor fatigado de sus palideces cadavéricas. Dúo  aberrante de los trazos hiperbólicos. Simples concubinas del sicario.

Los une la fuerza fulgurante de la condenación. Sus naturalezas solo pueden fraguar patíbulos de repugnante crueldad. Son el prodigio de la traición… Verdugos fanáticos.

Hieden a mentira. La maldición de sus vísceras vuela bajo el siniestro aleteo del hombre-buitre. Los aguarda la inmensidad de lo horrible, el destierro de la historia.

Ellos transcriben la biografía del desastre. No tienen alternativa. Son dos monstruos en convulsión de sangre. Perversos vagabundos de las comarcas del terror.

Juntos alquilaron, para la patria agonizante, una fosa que feriaron entre bárbaros alucinados. El basilisco bicéfalo quiere negociar el sepulcro de la paz para comprarle una caverna a su cánido carnicero, el cómplice de sus conspiraciones.





lunes, 9 de junio de 2014

El sepulturero de la guerra



El mayordomo de Farsolandia grita enardecido paz sobre las tumbas de un país corrompido. Su saliva ponzoñosa aglomera al tumulto en su escenario de sombras, deformidad grotesca de la demagogia. Él suplica ejecutar la condena horrible del tirano comunista. Pide ser alimentado con las sobras de los carroñeros. Oscura debilidad del orate extorsionado por el molde del populismo.

Las urnas, refugio desesperado del vicio electorero, son el ataúd de la conciencia. Lugar donde el sofista legaliza el engaño. Victoria del fraude.

Los corifeos de su campaña reptan. Sus gargantas insolentes vitorean la monarquía de la miseria. Sus hediondas túnicas de lacayos se inclinan ante la catástrofe del homúnculo cubano.

La fiebre amarilla, ideología pútrida, arrastra con el fanatismo de su ignorancia a las bestias de cabestro. Inflexibles y fatídicos vitorean delirantes a los signos más viles del averno, la hoz y el martillo.

Paz es el nombre del soborno con sabor a mermelada. Las nupcias del rapaz contra el erario se preparan para el saqueo en la revuelta de los chacales. La euforia de su mal inocula el germen de la paz que se negoció en un burdel del Caribe bajo la alevosía de un campamento de forajidos.

La debilidad moral irá a depositar su voto en la cloaca de la cleptocracia para premiar la dictadura de la mediocridad. Yugo encallado en el lomo del pueblo servil.

Él, el déspota histórico, entonará el himno de las cortesanas ante el trono irreductible de la Patria adúltera. La corrupción no capituló. La complicidad encadenada a la fraternidad del crimen triunfó sobre la verdad asesinada por una dupla infame de sicarios, las urnas de la paz.


miércoles, 4 de junio de 2014

Amigos, a la sala de redacción de Farsolandia llegó un documento que ruego el favor de hacer circular entre el rebaño de eunucos que pastorean este lote.

El circo de los farsantes.

El mismo dado es lanzado de nuevo, como el suplicio de Sísifo, para volver a caer sobre su única y fatídica cara, la cara de una farsa llamada Colombia. Un inframundo travesti que se disfraza de engaño, para creerse país. Una cloaca por vocación que desde la creación fue condenada al fracaso. Y no por sus instintos, ni sus riquezas o su belleza paradísiaca, ni tampoco por los puñados de inocentes ciudadanos anodinos que ven como los devoran los demonios que pare repetidamente la entraña de su mal eterno.

Esta trenza de tierra se condenó porque no se fatiga de criar protervos engendros que desde la más tierna infancia aprenden de la mano de sus padres (padres de la patria) a urdir contubernios para manipular, robar, engañar, pisotear, tender trampas y saquear riquezas y conciencias. Aquellos ángeles del mal están amparados por un sistema que nace históricamente y per sécula en la tenencia de la tierra y los recursos económicos, pasa por la política, por los medios -prostitutas del poder (pertenecientes al poder económico o político)-, y los líderes de las iglesias, que en su inocencia institucional pro cristiana son ultrajadas por las mismas enredaderas del mal y terminan sirviendo al capataz de turno, que alimenta con sevicia innata la toxicidad del cada día en Farsolandia. Tampoco se escapan de este aval para el fiasco permanente, millones de habitantes de todos los estratos y pelambres, que sin recato se creen buenos, pero cada día alimentan a esos cancerberos y luego se lavan las manos… sino, de dónde salen 6 millones de votos….

El país democrático, que ingenuamente cree que existe, se sumerge en las hordas informativas sobre las elecciones venideras. Que el uno desnudó la inmoralidad del otro; que el otro halló el lado oscuro de su competidor... y el colombiano ahí, con su ingenuidad violada y con sus genes de  mil años de odio hirviendo. Alrededor de 20 guerras civiles y un sinfín de actos de horror contra sí mismos no se ruborizan, sino que se expresan por uno u otro de los candidatos.

Otros, pocos, muy pocos, hastiados, miramos desde la ventana con los brazos cruzados la piscina de excremento donde nada el futuro, el nuestros y el de los hijos de la patria venidera. Algunos creen que los columnistas son independientes (si lo fueran, no escribirían en los medios del sistema, aunque algunos hacen intentos decorosos....); que los medios buscan el equilibrio; que los opinadores reconocidos no tienen vínculos ocultos; que las instituciones cumplen a trancas y mochas con su deber.... Y al tiempo se resisten a aceptar, por cursi, la idea de una conspiración en la que todos aquellos engendros son uno mismo, UNO solo que  lleva las riendas del destino en las fauces de su más oscura manipulación.

Otros tantos no votan, haciéndose cómplices inútiles que no aceptan cargos. Revolviendo el caldo bacteriano de nuestra orgánica desgracia.
El voto en blanco no sirve porque los Santos y los Zuluaga desde hace 200 años decidieron que fuera así. Y una consciencia individual limpia tampoco aporta.

La izquierda en Farsolandia no es más que un aleteo de universitario pobretón. Esos que se fueron a la selva para tender emboscadas al propio pueblo del que emergieron, quiebran sus conciencia con facilidad al primer millón o al primer cargo público, cierto Gustavo? Y el resto, comunistas multimillonarios... que fácil armar embelecos con los bolsillos llenos.

Todo juega en contra. El destino fatídico se burla de lo que parece, pero no es. Y ellos, los mal paridos, caminando de nuevo sobre la proclividad al fracaso, se sientan en las gradas de un circo donde 47 millones de payasos hacemos las delicias de estos espectadores farsantes que pagan el espectáculo desde hace dos siglos. Al final, todos regresarán a sus mansiones- madriguera a regodearse, cogerse la nalga los unos a los otros y a reír del pobre espectáculo que les ofrecimos. En 4 años serán otra vez amigos y mozas, compadres y aliados, contradictores dicharacheros con su asta viril lista para ensartarla en el travesti de nuevo.   

Y uno aquí, hablando basura, como si sirviera de algo.


miércoles, 21 de mayo de 2014

Yo creo que no creo




Yo creo que votar es apoyar la corrupción.
Yo creo que no votar es apoyar el fraude.
Yo creo que la guerra es mejor que la paz a la cubana.
Yo creo que Colombia fracasará en el mundial de garotas.
Yo creo que la movilización social solo produce pecueca.
Yo creo que cualquier TLC significa “Te Levantaré del Cogote”.
Yo creo que trabajar en este país es la ofensa de los esclavos.
Yo creo que los noticieros son el caos de la silicona.
Yo creo que una desgracia vale más que mil promesas políticas.
Yo creo que el Twitter atrofia el Área de Broca.
Yo creo que el “osea, márica y una carita feliz” es el discurso más elevado de nuestra juventud.
Yo creo que a este lote todavía le queda mucha tierra y agua para regalarle a los gamonales vecinos…

Yo creo que el país de la pobre viejecita seguirá siendo la eterna y amada Farsolandia en carnaval electoral.

Yo creo que si usted llegó hasta este renglón me estará diciendo apátrida… y saldrá a votar el domingo.

Yo creo que si cambiamos se acaba el circo nacional y eso es pavorosamente aterrador porque llega la civilización… y esa vaina no se puede tolerar porque si no tenemos problemas con que nos divertimos…


Que viva Farsolandia, la quejumbrosa.

sábado, 3 de mayo de 2014

Prisión para la libertad de prensa

Hoy, día mundial de la Libertad de Prensa, habrá que hacerle un monumento de campo de concentración a los medios masivos de incomunicación de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Ecuador, patrocinadores de la Revolución de los Miserables. El vicio carroñero de sus sofismas alimenta a los tiranos de la manigua.

Y a doña Farsolandia, alias Colombia, habrá que prepararle un hospital de guerra para que pueda parir su fraude electoral en el quirófano de la paz a la cubana.


En síntesis, el periódico de hoy cumplirá con su función de ente fomentador de la alta cultura bromatológica: madurará los aguacates del almuerzo… Mientras que Maduro y Castro lo usarán como pieza higiénica de sus tareas escatológicas. 

sábado, 19 de abril de 2014

el relato naufragó

Por fin el mexicano García Márquez dejó descansar a la literatura mamerta

martes, 11 de febrero de 2014

En Farsolandia andan de fiesta porque llegó el bochinche electoral... lo que ya olvidaron es que la reelección  es la dictadura de la democracia.

jueves, 16 de enero de 2014

Las culpas preguntan por una bendición


Por Julio Ricardo Castaño Rueda
Sociedad Mariológica Colombiana

La faena de llevar amigos al Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá a veces requiere de la paciencia del santo Job. Incredulidad, curiosidad, incertidumbre, disculpas, penas, dudas, miserias y el arsenal del pecado, reacio a la limpieza aumenta sus conjuros. Variadas conductas se imponen entre la planificación y el desplazamiento.

Algunos ridiculizan la historia. Profanan con sus comentarios ácidos la dimensión eterna del santuario. Unos pocos piensan que van a quedar al descubierto sus fechorías morales y los menos entendidos aseguran que la peregrinación es un ritual folclórico.

Los mohines de cada rostro marcan el derrotero de sus cuitas. El alma cerrera encuentra una oportunidad para desbocar sus tremendos secretos. El miedo íntimo a un Dios Omnipotente sigue siendo una constante terrible en el trasegar hacia el momento de la absolución.

En algún paso el peregrino prefiere volver al turismo religioso por comodidad. Pregunta por el estilo arquitectónico de la basílica o piensa en el mejor ángulo para la fotografía. Es la forma correcta de evadir el sendero que conduce hacia la reconciliación en el confesionario. Existe una aversión al sacramento del perdón. La excusa, es por lo general, un sofisma desgastado por la charlatanería callejera. “Yo no me confieso ante otro más pecador que yo”. La retahíla contra el cura es parte de un libreto escrito por el demonio.

La prudencia ordena una catequesis urgente y sin tregua contra el rubor de señalar la vía. Si no creen en el palabra del Creador por lo menos deberían aceptar las recomendaciones de un veterano en caídas. Quizás se logre algo de convencimiento. Las variables pasan por una encantadora cifra de buenas charlas para evadir la situación.


Una mujer, pensaba indignada, y así lo expresó que se le estaba quitando su derecho a ser  feliz. Su dicha consistía en romper el sexto mandamiento en su cama. Le preocupaba ser tildada de casquisuelta. En el fondo tenía un pacto con su cuerpo. Satisfacer sus deseos a escondidas de cualquier tipo de regla moral era parte de su libertad independiente. Confesar era algo inaudito. Su placer, era su tesoro. Posesión que no podría ser arrojada de su ser ni arrebata por una bendición. En síntesis, no tenía porque pedir perdón.

En contraste, un romero pudo desnudar su corazón de prostituta bajo el impulso de una necesidad más valiente. Se fustigó el interior con un látigo de arrepentimientos. Lacerado se arrodilló ante la ventanilla y se desahogó profundamente. Hincado de rodillas sus miembros encalambrados necesitaron de ayuda para colocarse de pie.

Los infractores y la Virgen tienen un encuentro de imanes. Los primeros tienen necesidad de su intercesión para poder explicar y repetir que son de barro. Ella, madre amantísima, se desborda en lágrimas de alegría que los ángeles riegan sobre cada pesar hasta hacer brotar una indulgencia. Las faltas, tanto tiempo guardadas bajo el amparo de un olvido programado para no acceder al arrepentimiento, emergen silentes.

Momento cumbre. El hombre se derrite frente al altar. La renovación del  individuo comienza por aceptar su fragilidad. Nada lo cubre. Los títulos de fuerzas académicas, los logros aventureros, el dinero por millones, las posiciones sociales encumbradas y las defensas agudísimas del intelecto humano caen al compás de una serenata de alivios. Solo ante la inmensidad de su nada, el penitente busca el refugio maternal.

Sublime instante. El grito celestial se escucha por los confines del universo. “…Os digo que de la misma manera, habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentimiento…” (Lucas 15, 10).

El intento comunitario se enredó en cualquier pretexto y la marcha continuó su distancia del Altísimo vivo.

Vuelve de atrás algún compadre desconcertado. Se acerca misterioso. Guarda en su mochila compañera una botella de ron adulterado, bebida de bucaneros. Su conversación es distinta. No quiere un sacerdote sino una explicación a su romance. Pasó por su existencia una curvatura hecha mujer. Desde entonces la cacería del problema se incrementó. El sujeto se sintió con la obligación suprema de conquistar a lo inalcanzable. Tartamudeó, exprimió la las endorfinas y preparó su plan explosivo. Objetivo: la mujer, su hermosura, su intimidad, su afecto.

La barrera de las circunstancias se imponía. El consejo de la sabiduría popular dictaminó: “Las casadas ni crudas ni asadas”. La respuesta del solitario don Juan fue: “Necesito una amante”. No consultó a su conciencia ni al camarada de antaño. Simplemente era un estratega en busca de la lid perfecta. Soñó con los laureles del triunfo sobre la hamaca montañera.

Las semanas del libertinaje se chocaron contra el muro femenino de: “estoy casada, pero hablemos”. Vaya paradoja. El  cerebro se le desquició. Desde ese momento talentos y riquezas se invirtieron en descifrar el porqué le dijo “hablemos”. Si la estulticia tuviera un monumento este sitio quedaría en la incertidumbre ingenua de ese enamorado.

La voz del romance canalla se aniquiló en los argumentos poderosos del amor adolescente. El sentimiento se transformó en un constructor de utopías. La idolatría se derritió ante el pequeño tótem en que se convirtió la casada.

Y la desgracia feliz apareció. Resulta que la señora lo encontró fascinante, culto, seductor, varonil y en un susurro condenatorio le confesó: Somos almas gemelas arrebatadas de su base por un yerro de juventud.

Ya no hubo talanquera ni barranco que los trancara.
El  asunto tenebroso es una victoria cotidiana. “…Mire, pasa  que  ya llevo cinco años a escondidas… Y bueno quisiera saber si la Patrona me puede ayudar…” La respuesta es una sola: Misericordia.

El hecho es un atentado flagrante, y lo condenó a la clandestinidad. El buen amante, la convirtió en su deidad particular. Dependía emocional del rato de gozo carnal. Explotó en un carnaval de ilusiones sosegadas bajo el chorro de licor. Los cómplices les prestaron moneda, vehículo, apartamento, lugares y disculpas.

Ebrios de sensaciones, borrachos de lujuria, y atormentados por esa tristeza fatal, tesoro sin mérito, se sometieron a la dicha contundente que los tuvo amanecidos: son lo prohibido. Luchan en franca derrota. Se desbordaron y se esclavizaron sin tregua.

¿Dónde está la salida? El cinismo mordaz los arropó bajo sus sofismas descarados. Nada pudo separar la dulzura desastrosa de esa miel envenenada. Fueron prisioneros encadenados a una lejanía agonizante. Inventaron recuerdos para escribirlos en letras que hicieron sangrar a los árboles. Las iniciales convictas dejaron su impronta en las cortezas de los ocales. La condición pasó su citación de cobro. Ella, la buena dama resultó embarazada de su legítimo esposo. Ella, en su sacra sabiduría señorial, decidió volver a reedificar la luna de miel en su hogar inmaculado. Un  rato de lágrimas potentes se apoderó de la tarde barrial. Los cuerpos saciados se despidieron fusilados. Ella compungida hizo borrón en un santiamén. Hasta nunca, porque la falsa deidad devoró implacable los años de combate tras las líneas maritales.


Él aún liba. La botella despreocupada guardó sus líquidas emociones. El mancebo tejió su desventura en la puerta del templo tutelar donde intentó negociar si valía la pena el olvido o podía seguir amándola en suicida terquedad. Entonces se dio cuenta que sólo quería preguntarle a la Santísima Virgen María, si todavía tenía un manto para abrigar su corazón desvencijado.