miércoles, 19 de marzo de 2008

GODARRIA


Algunos lectores, de la línea hoz y martillo, se quejan y piden explicaciones. Tildan al redactor de “facho”. Lo acusan de ofender instituciones, símbolos y personajes. Particularmente, les molesta el vocablo “Farsolandia”.

Respuestas: Primero. ¿Debo entender por “facho” que se refieren al glorioso saludo que me dispensa una monja con su brazo derecho en alto, al estilo romano?
¿Se referirán al término fascismo?: del italiano fascio, haz, fasces a su vez del latín fasces, pl. de fascis). El fasces era un haz de 30 varas (una por cada curia de la Antigua Roma) atadas a un cilindro alrededor de un hacha. Viejo emblema de los reyes etruscos. Sí, supongo que la arenga política tiene ese tinte foráneo que tanto encanta a la acomplejada lucha de clases.
Entonces quiero recordarles que el fascismo es un movimiento político, sustentado en una ideología totalitaria, que surgió en Europa para protestar contra las potencias vencedoras de la Primera Guerra Mundial. En su momento fue una tercera vía, populista-socialista, ubicada entre marxistas y capitalistas. (Cosas de la Euro-democracia).
Su progreso fulgurante se quemó antes de 1945. En manos de Benito Mussolini se convirtió en un desastre continental. El balandrón y sus estratégicas a mansalva impidieron que los Panzer tomaran Moscú en el invierno de 1941. Don Adolfo tuvo que enviar tropas de la Wehrmacht a Grecia y al Norte de África para evitar el aniquilamiento de los italianos.
Fin del fascismo de la Europa occidental y punto.



La derrota del fascismo moderado engendró el fascismo-marxista. El de las alambradas y el archipiélago Gulag. La tiranía de las hordas asiáticas, lideradas por José Stalin, inventó el extenso dominio de los autómatas. Las máquinas, alimentadas con las tesis de Lenin y la pecuela siberiana, crearon las ideologías esclavas de la falacia.
La dictadura del crimen fascio-comunista, sostenida con muros y los AK47, cayó bajo el empuje de la Coca-Cola, el maná del siglo XX. Tres fechas imborrables corroboran ese triunfo de la inteligencia feliz.
1. Caída del Muro de Berlín. (9 noviembre de 1989)
2. Tratado Dos Más Cuatro. Reunificación de Alemania. (3 de octubre de 1990).
3. Fin de la URSS. (21 de diciembre de 1991).
No, definitivamente no. El mote de Facho no le sienta bien al paso de ganso de mis cruzadas católicas. No soy fascista (partidario de esta doctrina o movimiento social) porque sus líderes primarios resultaron ser un fracaso rotundo. Dejaron de aplastar a los partidos demoliberal-masónico y socialista-asiático a su debido tiempo.
Además, espero poder cambiar el carné del Directorio Nacional Conservador por uno de la JUCO. Porque pa’ godos sectarios, los zurdos.
Ellos se resisten a entender que mis textos están diseñados para denunciar al régimen, corrupto y corruptor, que los mata. Lo inaudito es que lo defiendan. Definitivamente, la burocracia es la meta de todo anarquista furibundo. ¿Acaso no es el Polo Democrático Alternativo una fotocopia del vicio ruin y politiquero del burdel nacional? ¿Cuántos miles de millones, del Presupuesto Nacional, se gastó el Polo en la consulta interna del partido para elegir un candidato único?



Bastaba una reunión de cofrades, votación y listo. A la hora de mamar gastos de la ubre de la gran ramera, la izquierda es una derecha recalcitrante. La verdad no duele, la verdad sana.

Segundo. La ofensa requiere vida racional para ser válida. Así que la acusación no procede. Los semovientes que mangonean en el lote, desde la dehesa sabanera, no captan ni el sarcasmo ni la razón. Sus cueros de reptiles son duros y resistentes a mi prosa. Total, no los ofendo. Si algo les molesta tienen la opción de enviarme un sicario jurídico.

Tercero. Las instituciones y sus símbolos no son más que ladrillos y garabatos. El quejido debe provenir de los ordeñadores del presupuesto. Ellos se rasgan las vestiduras, pero se olvidan de las nóminas paralelas, las corbatas y los serruchos. Pregunta: ¿Existe alguna venerable entidad oficial que no haya sido investigada por delitos untados de soborno apestoso?

Y la Patria, cuyos máximos exponentes son las fosas comunes, no me produce ningún orgullo chauvinista. Nada de hablar de biodiversidad, posición geoestratégica, recursos naturales y demás retahílas de guía turístico porque eso es obra del Creador. Regalo gratuito de Dios para una etnia enrazada con el delito.

Sentiré algo de honor patriotero cuando no encuentre páramos sembrados de amapola o papa. Ni toallas higiénicas en el río de los Siete Colores en la sierra de la Macarena.

Cuarto. El porqué de Farsolandia. La respuesta, mis queridos bolcheviques, podría abarcar 200 años de tramoyas orquestadas por los famosos patriotas de levita. Ellos hicieron parecer a Su Majestad Fernando VII como un liberal de avanzada.






Fíjense que no traté al rey de España de corruptor de traidores ni de alcahueta de su santa madre. Me refiero a doña María Luisa de Borbón. La buena dama adornó la testa real con las lujurias de Godoy, el favorito de la reina. Vieja casquivana.

Y de tal catre tal astilla. Fernando VII se conoció con el mote del rey Felón. Él fue capaz de destronar a su progenitor, don Carlos IV. Sí, Fernando VII fue rey de Cundinamarca donde las ambulancias se alquilan para prestar servicios de taxi.

Lo que se hereda no se hurta. Así, con esos mandamases, llegó el gen del resabio denominada “colombianada”. Fin de cualquier acto evolutivo decente. Sin embargo, la moda se impone con los estudios de ADN.

El famoso Sabio Caldas, homosexual y cornúpeta, no tenía la corpulencia ni la estampa que muestra los afiches de las escuelas públicas. Los CSI de Colombia lo demostraron con sus análisis de huesamentas. Espero que los guardaespaldas de la mentira no me lancen sus acostumbradas perogrulladas.

Y otra perla, de esas que se vuelven canción y monumento de bronce. “…El fuego de Galán y de Alcántuz se extendió por las tierras del sur…”. Escribió don Jorge Villamil en su canción si pasas por San Gil. Lo cierto es que la candelada de José Antonio Galán es la biografía de un traidor. La prueba reina de su deslealtad contra los comuneros permanece en el Archivo de Indias de Sevilla, índice 117-3-4.

Los colombianos crecieron amantados por una comedia institucional donde la mentira izaba a la bandera. Ahora es al revés. La bandera iza a la mentira.


2 comentarios:

Julio Ricardo Castaño Rueda dijo...

Simplemnte maravilloso. La voz de los que tenemos voz-

Paola y Leonardo dijo...

Simplemente Maravilloso. La voz de los que solo tenemos derecho a tener voz.